Hoy os traigo un destino que no es muy conocido, pero que es precioso y que bien merece la pena descubrir. Møns Klint son unos acantilados del mar Báltico, situados a casi dos horas de Copenhagen. Su particular color blanco debido a la piedra caliza y color azul claro del mar, hacen que este lugar sea único. Una estampa muy diferente a lo que se suele conocer de Dinamarca, por lo que es una visita que no te puedes perder, sigue leyendo para saber más sobre los acantilados Mons en Dinamarca!
Historia de los Acantilados Mons en Dinamarca
Estos acantilados son un montaje de biotipos de los más ricos de Dinamarca que se formaron por la combinación de la piedra caliza con un seco clima local y la agricultura. Tienen 128 metros de altura aunque con el paso del tiempo se están derrumbando debido a la acción del viento y las precipitaciones.
¿Cómo llegar?
Llegar hasta los acantilados Mons en Dinamarca es bastante fácil. Si viajar desde Copenhagen puedes llegar en coche fácilmente.
puedes seguir las indicaciones de GPS para llegar hasta el Geocentro (Stengårdsvej 8, 4791 Borre, Dinamarca) que están justo arriba de los acantilados.
La zona está un poco apartada, no te preocupes si parece que estas perdido, ya que la carretera atraviesa una zona natural. Los acantilados están rodeados de bosques y prados preciosos que hcen que se encuentren un poco alejados. Cuando llegues, puedes aparcar en el parking (de pago) del geocentro o en los alrededores de la zona exterior donde hay varias explanadas.
¿Cómo acceder a los acantilados?
Una vez llegues al geocentro si tienes tiempo, te recomiendo que lo visites porque es muy interesante y aprenderás mucho de los acantilados. Tras tu visita, puedes pasear por alguno de los senderos que ofrecen vistas al acantilado desde arriba. Hay varios senderos de diferentes distancia, en los que podrás pasear tranquilamente para disfrutar de las vistas panorámicas.
Otra de las opciones para disfrutar de los acantilados es bajar hasta abajo del acantilado. Las escaleras son largas pero merece la pena llegar hasta la orilla del mar. Las vistas que ofrece los acantilados desde abajo son impresionantes y el poder disfrutar desde abajo de toda la pared de color blanca de los acantilados es una pasada!!
Nosotros fuimos en dos ocasiones, y en la primera nuestra idea era bajar hasta la orilla y recorrer todos los acantilados por abajo hasta poder subir en la siguiente escalera para volver al aparcamiento por el sendero de arriba… digo “era nuestra idea” porque claro, se nos olvidó la marea… y como fuimos bastante tarde (tarde me refiero más tarde de medio día) no nos dio tiempo a cruzar antes de que subiera la marea y tuvimos que volver por el mismo camino.
Sin embargo, la segunda vez que fuimos si que nos dio tiempo a hacer todo el recorrido por la costa de los acantilados, es una experiencia muy bonita, donde hay mucha paz y donde la inmensidad de las paredes te sumerge!
Espero que os haya servido de ayuda este artículo sobre los acantilados Møns Klint y que podaís disfrutar de esta maravilla de la naturaleza.
